Se publicó por primera vez en el perfil de Facebook de Satori Gigie, un lunes 27 de octubre al promediar las 14:50.
Luego de esa primera publicación, donde muestra una fotografía de una señora cargando un aguayo y llevándose en una carretilla al majestuoso Illimani -icono de la ciudad de La Paz- se volvió viral en las redes sociales y el internet, haciendo que muchos que lo compartieron no respeten los créditos ni mencionaran al autor y fueron los mismos comentarios en las redes sociales quienes reclaman por respetar la autoría.
Wilfredo Limachi Mamani, de 27 años de edad, aficionado y no experto en fotografía, aclara que es conocido en la red del Facebook como Satori Gigie, «Satori”, por el término japonés que designa la iluminación en el budismo zen, y «Gigie” porque su sobrina no podía pronunciar el nombre de Wilfi y terminaba diciéndole «Gigie”.
Egresado de la carrera de Comunicación Social de la UMSA, conocido vecino en la zona de Pasanqueri –zona intermedia entre las ciudades de La Paz y El Alto– sus variadas fotografías y algunas frases publicadas en internet son referentes desde ese punto geográfico, sus publicaciones denotan detalles y mensajes que quiere compartir no sólo con la comunidad internauta, sino con todo aquel que quiera conocerlo, es quien tomó la fotografía sin pensar en el impacto que causaría en varios espacios.
Cuenta que fue una tarde de arduo y duro trabajo lavando la ropa de la semana y haciendo la limpieza en su domicilio, cuando su madre, Valentina Mamani, de 65 años de edad, oriunda de Guaqui, «ya cansadita” -recuerda cuando habla de ella- se disponía a votar los restos de hojas y arbustos caídos en todo el patio, (con frecuencia lo votan al barranco que está cerca de su casa), de inmediato Satori colgó su cámara al hombro y fue detrás de ella.
Intentó varias tomas, buscó el ángulo exacto y fue la culpa de un amigo canino conocido de una de las esquinas que pretendía morderlo, con los ladridos le obligó a retroceder unos pasos y sacar el momento exacto cuando su madre se llevaba el majestuoso nevado del Illimani.
La foto en internet es viral, internautas y algunos expertos en fotografía lo bautizaron con varios nombres desde «Mujer aymara que trabaja en los Andes” hasta nombre como «mujer de pollera se roba el Illimani en carretilla”.
Según el autor de la foto, sólo quiso reflejar el valor de una mujer trabajadora, a «la mujer para seguir trabajando, y a seguir construyendo esta ciudad y este mundo”.
La fotografía es destaca a propósito de la campaña por La Paz ciudad maravillosa, que resalta otro ángulo de la ciudad que tal como dice el autor también puede ser representada con la imagen de una mujer trabajadora.