El experto en entrenamiento a líderes empresariales, trabaja con grandes compañías a escala y recomienda crear ambientes amigables en las empresas.
El primer tema son las herramientas para dirigir equipos de alto rendimiento. Esto se refiere a las sinergias.
El segundo eje estará enfocado a comunicar bien para dirigir mejor. Es decir, el empresario tiene que saber diferenciar tres herramientas claves: una cuestión es informar, otra comunicar y otra distinta es persuadir. Se trabajará en los tres niveles de herramientas y su diferenciación.
El tercer eje medular que vamos a trabajar se llama ingeniería de la persuasión. El mundo de las redes en la sociedad nos ha llevado puntualmente a que el que sabe trabajar liderazgos, crea espacios de participación comunitaria y ese es un gran desafío en nuestra mentalidad.
Por eso, la cuarta herramienta es desmantelar las limitaciones que se tienen. En América Latina se creyó en el concepto de que el éxito es individual; y hoy, el éxito individual queda totalmente supeditado al éxito colectivo.
No puede haber empresas exitosas en pueblos fracasados.
Por último, vamos a trabajar específicamente en las tres claves de la organización de líderes mundiales. En las empresas tenemos que hablar de visión, agudeza y flexibilidad.
Es una herramienta clave. Es comunicar con una intención positiva de que el otro esté a bordo de lo que yo estoy planteando.
Este proceso es importante desde la construcción de la confianza para que de esa manera pueda entender y hacer cosas con el otro.
A la persuasión, le antecede la gestión de la confianza. Si no, caeremos en la persuasión, como manipulación; y esto no tiene nada que ver.
Para crear un mundo donde la gente apasionadamente quiera pertenecer, tengo que persuadir. Para persuadir lo hago con un proyecto, un sueño, una visión. Por eso es que la persuasión es un andamiaje que nos permite construir futuro.
Este es un tema central. Esto no solo pasa en Bolivia, sino en el mundo. El Estado está teniendo miedo de la población y entonces, lo que busca es evitar comunicar sin darse cuenta que genera un efecto totalmente contrario. En las empresas pasa algo similar.
Las empresas tienen muchos problemas para poner en sus organizaciones, a un comunicador y empiezan a ocultar esos espacios para informar.
Mi propuesta es que deliberadamente empiecen a trabajar en comunicación institucional, que les va a permitir que el espacio vacío que dejan, no sea llenado con una imaginación de lo que está pasando.
Es así que hay una gran cantidad de personas que empiezan a creer que a la información, cualquiera la puede construir.
No se puede no comunicar. Es importante que las empresas o el Estado, entiendan que uno de los axiomas claves de la comunicación es que no se puede no comunicar. Toda ausencia también es una comunicación.
Por eso es importante y los periodistas tienen una oportunidad de poder empezar a mostrarles no solamente desde el espacio periodístico, sino desde la comunicación institucional, la importancia que tiene para la empresa y para el Estado la información compartida.
Algunos piensan que porque no publican en las redes no están en las redes.
Es hora de que el Estado, los empresarios, los docentes, las escuelas, empiecen deliberadamente a comunicar.
Es una construcción de valor. Es una oportunidad extraordinaria de que los empresarios o dirigentes, tengan en cuenta la importancia que tiene el trabajar para aprender a comunicar. Hay un cierto analfabetismo en la comunicación.
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