Las cadenas productivas de las nueces de Brasil (castañas), la quinua, la chía, la joyería de oro y plata, los cueros, el alcohol y el azúcar pueden ser las más atractivas para la Unión Europea (UE), que podría abrir, sin aranceles, ese gigantesco mercado en caso de firmarse un acuerdo comercial con Bolivia.
Al momento, estos productos, junto al limón y sus derivados, son los más importados por el bloque europeo, pero en algunos casos deben pagar aranceles.
En el marco del foro «Potenciales beneficios para Bolivia de un acuerdo comercial con la Unión Europea”, organizado por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) y la embajada británica, el embajador del Reino Unido, James Thorton, habló ayer acerca de las cadenas de productos más interesantes para la UE.
Definitivamente los productos agrícolas primarios y con valor agregado tienen un gran potencial en el mercado europeo, productos como la quinua, la chía, el café y las nueces de Brasil, entre otros”, sostuvo el representante.
El embajador también destacó otros como el azúcar y sus derivados (alcohol etílico, alcohol anhidro), el limón y otros no agropecuarios, como el cuero y la joyería en metales preciosos, que tienen un gran potencial en Europa.
El gerente técnico interino del IBCE, Juan Pablo Saucedo, informó que estas cadenas de productos ya se encuentran entre las principales exportaciones no tradicionales hacia la Unión Europea, pero con un acuerdo mejoran las condiciones.
«Lo ideal ahora sería mejorar las condiciones en las que nuestras exportaciones llegan a los mercados europeos y para eso es necesario un acuerdo comercial”, remarcó.
De acuerdo con los datos del IBCE, en los últimos años Bolivia sólo aprovechó un 20% los acuerdos vigentes con la UE, como el SGP-Plus. «Es decir que en los últimos 10 años sólo el 20% de nuestros productos se beneficiaron de la rebaja de aranceles, mientras que el resto de las partidas lo hicieron con condiciones normales”, añadió.
Saucedo se apoyó principalmente en las experiencias de Perú, Ecuador y Colombia, países socios de Bolivia en la Comunidad Andina de Naciones (CAN) que ya mantienen acuerdos con la UE.
«Tanto Perú como Colombia han obtenido beneficios sustanciales de sus acuerdos; el 94% de los productos colombianos entraron a Europa con una desgravación inmediata cuando se suscribió el acuerdo; en Perú fue de un 95%”, explicó.
Uno de los productos de potencial demanda es el azúcar, que actualmente no se exporta al bloque. Sin embargo, mediante un acuerdo se podría aprovechar su perfil exportable, tal como lo hacen Perú y Colombia.
Según los datos presentados, en un eventual convenio comercial Bolivia podría cubrir la demanda europea de azúcar, lo que implicaría un aumento de fuentes de empleo directo e indirecto.
La UE es un mercado de más de 500 millones de consumidores. Sus importaciones por día suman 14.520 millones de dólares.
Ecuador Aun sin tener un acuerdo vigente con la UE, se benefició con un despegue de sus exportaciones ante la noticia del fin de las negociaciones en 2014. Las exportaciones ecuatorianas, sobre todo en el sector agropecuario, alcanzaron un aumento del 86% hasta 2015.
Colombia Las exportaciones colombianas a la Unión Europea crecieron en 76% desde la firma del tratado de libre comercio con la UE en 2010, aunque con déficit comercial.
Perú En el caso de Perú, las exportaciones a la Unión Europea representaron un 19% de todas las ventas de ese país. Perú ha mantenido el superávit comercial.
Bolivia corre el riesgo de quedar rezagada y detrás de países de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) por no tener un acuerdo con la Unión Europea.
El embajador de la Unión Europea, Timothy Torlot, afirmó que es el turno del país de pensar más en los mercados externos y sugirió que la posibilidad de una negociación con la UE sea un tema de debate público.
«Existe la predisposición de la Unión Europea de retomar las negociaciones con el país. Lo único que falta es que el Gobierno tome la iniciativa y para eso debe haber una posición de parte de los sectores” remarcó.
Sin embargo, Torlot aclaró que cualquier acuerdo que se firme con Bolivia estaría enmarcado en los convenios ya firmados con los otros países de la CAN.
«Ya existe el acuerdo, hay tres modelos distintos, pero todos parte de un solo acuerdo. No se tratará un acuerdo bilateral con Bolivia, se tratará de unirse al acuerdo multipartes que ya hemos suscrito con la CAN, no empezaremos a negociar un acuerdo nuevo” afirmó el embajador de la Unión Europea.
Una mayor inversión extranjera es uno de los beneficios que traería un acuerdo con la Unión Europea, sostuvo el presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Antonio Rocha.
«Las condiciones que traería un acuerdo con la UE, similares a las que tienen nuestros países socios, ayudarían a aumentar las inversiones de ese bloque en Bolivia”, aseguró.
En los últimos 10 años, los países de la Unión Europea han sido los principales inversores extranjeros en Bolivia, sobre todo España y el Reino Unido.
Como bloque, la UE ha sido responsable del 50% de las inversiones extranjeras en el país, de acuerdo con el IBCE.
«Sus inversiones evidentemente han estado orientadas al campo del sector hidrocarburos, a los campos extractivos y al sector minero, pero también hubo inversiones en otros sectores”, agregó.
Según Rocha, en el pasado se podría haber obtenido mayores niveles de atracción de capitales de parte de la UE, de haberse garantizado las condiciones necesarias de seguridad jurídica y reglas claras, sobre todo en sectores generadores de empleo como el industrial y la manufactura.
«Sin embargo, se optó por una integración limitada a base de la afinidad política, por lo que se perdieron ventajas arancelarias que hacían atractivas las inversiones”, explicó el ejecutivo.
Rocha señaló que en el futuro, con un acuerdo comercial, los países de ese bloque podrían invertir en sectores que requieren mejores niveles de exportación, por ejemplo en el sector de alimentos, que tiene un enorme potencial.