En 2013, el país registró los niveles de Inversión Extranjera Directa (IED) neta más altos de los últimos años, con un saldo consolidado de 1.749,6 millones de dólares.
Según el reporte de balanza de pagos del Banco Central de Bolivia (BCB), esto representa un crecimiento del 65,1% con respecto a los flujos captados un año antes (ver gráfica). Además representa 5,7% del Producto Interno Bruto (PIB).
El pasado 15 de mayo, la calificadora internacional Standard &Poor’s (S&P) elevó la calificación de riesgo país de Bolivia de BB- a BB, una ubicación que es alcanzada por primera vez.
El informe destaca el crecimiento sostenido del Producto Interno Bruto (PIB) -que en 2013 llegó al 6,8%-, la amplia liquidez externa y los superávit fiscales y de cuenta corriente registrados en los últimos años, lo que da a la economía nacional una mayor capacidad para resistir shocks negativos.
Según el Ministerio de Economía, con esta mejora, Bolivia se consolida nuevamente como un país económicamente sólido, estable y altamente atractivo para las inversiones privadas, lo que permitirá abrir nuevas oportunidades para atraer recursos de grandes inversionistas en el mundo y generar mayores flujos de inversión extranjera contribuyendo así al desarrollo de la economía de Bolivia.
La calificadora considera que el país presenta una perspectiva estable basada en su expectativa de continuidad en las políticas económicas después de las elecciones a finales de este año, manteniendo los niveles de inversión del sector público, especialmente en el sector de hidrocarburos, que permitirán sostener los niveles de crecimiento del PIB.
También destaca las recientes leyes aprobadas en materia de inversión para que los capitales público y privado en recursos naturales apuntalen la economía en los siguientes años.
La calificación de riesgo otorgada al país por las calificadoras Moody’s (Ba3) y Fitch Ratings (BB-) a diciembre es estable y con perspectivas de mejora, señala el Banco Central de Bolivia (BCB) en su reporte de balanza de pagos.
La calificación de riesgo de Bolivia se mantiene en un buen nivel, con la perspectiva de mejorar”, precisa.
Los informes de las calificadoras destacan la reducción de la deuda, el crecimiento de la economía boliviana, el incremento de las reservas internacionales, la disminución de la dolarización (bolivianización), un sistema bancario saludable y un régimen monetario estable como las causas para la mejor calificación, de esta manera se ratifica que los resultados macroeconómicos obtenidos por el país en los recientes seis años han sido satisfactorios.
El Ministerio de Economía considera que la mejora en la calificación de riesgo corrobora el reconocimiento internacional a los logros económicos y sociales obtenidos por el país.