Analistas coinciden en que si Brasil gana la Copa se puede esperar un mejor desempeño bursátil ¿en qué sectores es correcto esperar este efecto?
Los analistas y grupos de inversión más grandes del mundo coinciden en que Brasil será el gran ganador del Mundial 2014. Esta previsión, compartida por varias entidades, no sólo traería la gloria deportiva sino que también ocasionaría que muchas empresas con capitales brasileros también experimenten jugosas ganancias.
Entre las organizaciones que publicaron sus previsiones se encuentran: Goldman Sachs que, basándose en análisis estadísticos, afirmó que el país más grande de Latinoamérica saldrá victorioso de la final el 13 de julio contra su temido rival Argentina; por otro lado, el banco brasileño Itaú-Unibanco vaticinó que Brasil llegará a las semifinales y Bloomberg que sugirió que el país anfitrión superaría a España y se quedaría con el codiciado trofeo.
Pero la pregunta que se hacen la mayoría de los inversores posicionados en Brasil es si, además de ganar el campeonato mundial, percibirán ganancias en sus portfolios. Hasta ahora, el índice Bovespa cotiza levemente por encima de los niveles de fines 2013 y para poder compensar los retrocesos de ese período, no será solamente necesario un repunte estacional debido a que Brasil es el anfitrión del Mundial sino mucho más.
Tras pasar un 2013 complicado, el mercado brasilero comenzó el 2014 más sólido. Sin embargo, en el primer trimestre, el crecimiento fue inferior al esperado: 0,2%. Esa baja performance llevó a los economistas a disminuir sus pronósticos para este año. Itaú predice que el PIB se incrementará sólo 1% en 2014, comparado con una anterior proyección de 1,4%, y citó como motivos las señales de menor actividad industrial, la débil demanda de crédito y la caída de la confianza de empresas y consumidores.
Según publicó el diario El Cronista, la Copa del Mundo podría beneficiar a algunas compañías. A continuación, entérese a cuáles:
Según informó Goldman Sachs, los mercados de valores de los países que son sede del torneo históricamente mejoran su desempeño levemente en el mes posterior al evento. Sin embargo, Brasil está más condicionado por su futuro político que por algo estacional como es la Copa Mundial.
La FIFA ingresa aproximadamente 1.091 millones de euros en concepto de patrocinios, gracias al apoyo de grandes empresas como Adidas, McDonalds, Johnson&Johnson, VISA o Budweiser. Por eso, obliga a la sede que acoge en Mundial a aprobar leyes que protejan a marcas y a sponsors.
Organizar un Mundial de fútbol es mucho más que construir un estadio y contar con una oferta hotelera adecuada. Acoger el gran trofeo de la FIFA implica, además, actualizar la legislación para proteger uno de los activos más importantes: las marcas y los patrocinios que generan cerca del 90% de los ingresos que obtendrá la FIFA por Brasil 2014.
La notoriedad que tiene este tipo de eventos deportivos es muy tentadora, sobre todo para pequeños y medianos negocios que intentan crecer amparados por la sombra de las marcas y emblemas oficiales.
La FIFA informó ayer que, a solo una semana del partido inicial del Mundial Brasil 2014, ya vendió 2,96 millones de las 3,10 millones de entradas disponibles para los 64 partidos de la competición. “La gran expectación mundial por el gran acontecimiento se constata claramente en las 11 millones de entradas solicitadas, pese a que solo había 3,1 millones de localidades disponibles”, indicó la entidad del fútbol en un comunicado.
La lista de diez países que más compraron la completaron Estados Unidos (196.838), Argentina (61.021), Alemania (58.778), Inglaterra (57.917), Colombia (54.477), Australia (52.289), Chile (38.638), Francia (34.865) y México (33.694).
Todo aficionado sueña con ver un partido de la Copa del Mundo en el país pentacampeón mundial. Nunca antes habíamos vendido directamente tantas localidades al público, algo que consideramos muy importante”, afirmó el secretario general de la FIFA, Jérôme Valcke, citado en el comunicado. De acuerdo con el dirigente, la demanda de entradas para el partido de apertura y para la final se multiplicó por diez.