Tras reportarse un crecimiento en la producción vitivinícola y promover una “cultura del consumo”, se abrieron anoche las puertas del IV Festival de Vinos, Quesos y Jamones Vinofest 2013, en el campo ferial de Alalay.
La producción de uvas durante los últimos cinco años, de acuerdo a los mismos productores y datos de Fautapo, ha crecido entre 10 y 20 por ciento, lo que ha motivado a que las bodegas adquieran mayores y mejores tecnologías, dijo Eunice Achá, gerente de la Fundación Feicobol, organizadora del evento.
En ese contexto, 85 empresas, de las cuales 70 por ciento correspondían a bodegas (nacionales y extranjeras), recibieron al público anoche en medio de una fiesta, entre cantantes de tango y chacarera.
Según la Gerente, la motivación para organizar el evento, no fue impulsar un consumo masivo del vino, sino para promover una cultura del consumo, pues la producción y las técnicas para el servicio, incluyendo el maridaje (acompañamientos) constituyen poco menos que un arte.
Por esa razón, el Vinofest ha ido acompañado de productos que acompañan el consumo, como los jamones y los quesos.
“La gente va conociendo la cultura de vino, detrás de todo esto hay mucho que hablar, dentro de lo que son las cepas, el tipo de tierra. Bolivia por tener altura de valles produce muy buenos viñedos”, opinó sobre el punto Sergio Rojas, representante de Viñedos La Cabaña, de la marca Kolberg. “La gente es cada vez más exigente con la calidad, eso se llama cultura”, explicó a tiempo de mencionar los 60 años de vida de vinos Kolberg, algunas de cuyas cepas le han valido premios internacionales.
Sin embargo, la cultura del vino incluye también el maridaje o acompañamiento, como los jamones, cuyo procesamiento es otra técnica y otro arte, como lo explicó Julio Alem, uno de los socios de Jamones Sierra Nevada, presente en el Vinofest.
“Para lograr un jamón de calidad hacen falta entre 13 y 17 meses, y hay que conocer las temperaturas a las que se debe someter la carne y en qué meses… incluso el corte requiere de técnica, no se corta como cualquier carne para sándwich”, explicó.
Según Alem, el consumo de jamón no es masivo, sino selectivo, aunque cada vez hay más demanda, por ejemplo en matrimonios o para regalos. De allí las diferentes ofertas en la feria.
La principal competencia de estos jamones, son justamente los procedentes de Tarija y los que llegan de contrabando al país, explicó.
Del 17 al 19 de octubre de 2013
Campo ferial de la laguna Alalay
Cochabamba, Bolivia
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