El Gobierno impulsa acciones para ampliar el mercado de China y abrir los de Rusia y Chile para la producción boliviana de carne. Al primero, se sumarán a los productos bovinos los de ave y cerdo, mientras que los otros están en diferentes niveles.
Datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) procesados por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) dan cuenta que el 2019 —año en el que se abrió el mercado chino para la producción nacional de carne— las exportaciones bolivianas del alimento sumaron de enero a noviembre 3.712 toneladas (t) por un total de $us 17,03 millones.
En volumen, los principales destinos fueron Perú (50%), Ecuador (24,27%) y China (24,13%), y en valor Perú (48,73%), China (25,83%) y Ecuador (23,54%).
Con esos resultados, el Gobierno decidió continuar con las acciones para consolidar China y otros mercados como el ruso y el chileno, restando las autorizaciones de cumplimiento de las normas de higiene y calidad que se exigen en cada país.
Para el caso de carne porcina y de ave para el gigante asiático, el director ejecutivo del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), Carlos Peñaranda, informa a La Razón que avanzan los trámites y que solo se aguardan la visita de una misión al país.
“La agencia de aduana de China mandará un equipo técnico para evaluar los sistemas sanitario y productivo de cerdos y aves en la misma modalidad efectuada para la carne bovina”, indica.
Respecto a Rusia, Peñaranda prevé que hasta abril el país cuente con la autorización sanitaria para la exportación de carne de res a ese mercado de más de 146 millones de habitantes.
“Como parte del procedimiento a completar, solo esperamos que nos respondan a un cuestionario sanitario”, dice y complementa: “Dependemos del Gobierno ruso, si es que quiere hacer una segunda misión o si no partir con el tema de exportaciones”.
El gerente general de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), Javier Landívar, anticipó que Frigor es el primer frigorífico que cumplió con todas las exigencias de sanidad de las autoridades rusas, por lo cual ya está habilitado para exportar a ese mercado. Fridosa y BFC a su vez aguardan la autorización correspondiente.
“Pidieron información complementaria, documentada por el Senasag, que fue presentada al Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país. Se espera la respuesta” para los próximos meses, indica.
Por la proximidad y precios competitivos, Chile es otro mercado con el cual avanzan las gestiones para la venta de carne de res. En este caso, se espera la visita de una misión para marzo. “Tenemos el interés de exportar al mercado chileno, principalmente al norte. Hay la voluntad y la decisión de las autoridades del Servicio Agrícola Ganadero de Chile de hacerlo”, sostiene Peñaranda.
Según Landívar, en los próximos días se enviará al país vecino los últimos expedientes con las respuestas a las consultas que formularon sus autoridades sanitarias, con lo cual en marzo serán inspeccionados los frigoríficos bolivianos que esperan contar con la autorización respectiva el segundo semestre de este año.
1. Hito. Tras un año de gestiones, el 28 de agosto de 2019 se efectuó el primer envío de 48 toneladas de carne bovina boliviana a China, el mercado más grande del mundo.
2. Rusia. En febrero de 2019, una primera misión técnica sanitaria del Gobierno ruso visitó el país para verificar procedimientos de inocuidad animal. Casi un año después, se aguarda la autorización para exportar a ese mercado.
3. Ventas. Entre 2014 y noviembre de 2019, las ventas internacionales de carne de res y derivados sumaron $us 86,3 millones.
Descentralización de servicios e institucionalización son los retos que enfrenta la nueva administración del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), procesos que se implementarán mediante decreto antes de que finalice la gestión del Gobierno transitorio.
El anuncio lo realizó a este medio el director ejecutivo de la principal institución sanitaria del país, Carlos Peñaranda, al efectuar un balance de los primeros 50 días de su gestión.
Sanidad. “Creo que es una demanda general de todo el sector privado, de darle la certeza de un servicio que le dé garantías sanitarias a las exportaciones y al mercado interno”, sostiene.
Argumenta que Senasag es “una entidad muy centralista que depende mucho de la firma del director”, por lo que para optimizar su labor necesita “desconcentrar” competencias a las jefaturas departamentales, lo cual incluye la institucionalización.
“Es necesario que los profesionales hagan carrera, tengan permanencia más allá de los cambios de gobierno”. Para ello, se cuenta con la decisión política de la presidente Jeanine Áñez y de los ministros del área, afirma.