Bolivia y la Unión Europea (UE) fijaron los términos para negociar un acuerdo comercial que incluya cooperación, además de la liberación de aranceles para el comercio de bienes de consumo, anunció hoy el viceministro de Comercio Exterior e Integración, Benjamín Blanco, en el programa El Pueblo es Noticia.
Aunque no precisó la fecha exacta para el inicio formal de las conversaciones, anticipó que el lanzamiento de estas negociaciones “está bastante cerca” y dijo que se proyecta un acuerdo “bastante amplio” que beneficiará a ambas partes.
Blanco anticipó que, a diferencia de la lógica de los tratados de libre comercio, se apunta a tener un acuerdo complementario a través del cual se respeten los principios constitucionales del país vigentes desde hace 10 años.
“Hay temas constitucionales que van con nuestros principios y que deben verse en el nuevo acuerdo”, explicó la autoridad.
En cuanto a los bienes de consumo, el viceministro afirmó que en Europa existe un interés especial en “los superalimentos”, como la quinua y otros productos orgánicos, que podrán exportarse sin barreras arancelarias al viejo mundo una vez que se logre el acuerdo.
Entre Bolivia y la UE está vigente actualmente el Sistema General de Preferencias arancelarias mejorado o plus (SGP+) que permite la exportación de unos 5.000 productos, pero bajo ciertas condiciones planteadas por Bruselas como la reducción de la pobreza y la lucha contra las drogas.
Con el acuerdo comercial y de cooperación que tendrán Bolivia y la UE, las reglas serán definidas en el ámbito bilateral.