En un «mercado», es convertido en la tarde y parte de la noche la explanada frente al edificio de Correos, en el centro paceño, por vendedores y compradores virtuales, quienes concretan en ese lugar las negociaciones que realizaron horas antes en diferentes páginas de Facebook como ‘Guerra de Subastas’.
En las páginas en Facebook como Barrio chino, Guerra de subastas, Compradoras compulsivas, La tiendita de mamá, Subastas locas en La Paz o Ropas y accesorios se ofrecen una diversidad de productos a los usuarios, además son escenarios de pujas o subastas por una determinada mercancía.
En esos grupos “tú ofertas, muestras la prenda y el precio. Y dependiendo del interesado, si le conviene o no, para acordar la venta”, cuenta una de las personas dedicadas a la venta en Facebook que prefiere el anominato.
En horas de la tarde y la noche, frente a Correos se concentra un inusual número de personas para concretar la venta-compra de ropa para todas las edades, juguetes y hasta alimentos. La mercadería es nueva, a medio uso o americana.
Los entrevistados, que prefirieron omitir sus nombres, coincidieron en que la venta es directa y o vía subasta.
Con la subasta yo conseguí perfumes casi a mitad de precio del original”, asegura Vilma Alí, quien vende ropa de niños y aguarda la llegada de sus clientas con quienes en Facebook concretó la venta de varias prendas.
Correos, independiente de la forma de venta, es el lugar para concretar el negocio. “Los compradores nos dicen: en Correos porque es un lugar céntrico y público. Vemos la cercanía para ambos”, cuenta Adriana R.
Por la afluencia de gente en ese lugar, en su mayoría sentada en las graderías, existe control policial. “Ellos no quieren que ofertemos los productos, nos llaman la atención”, comentó una comerciante que hace uso de las redes sociales para ofertar su mercadería.
Una de las características de quienes venden es el que está atentos a sus teléfonos celulares a la espera de la llamada de sus compradores para hacer el contacto. “Uno tiene que ser serio. Yo solo espero una hora, sino vienen me voy”, cuenta otra vendedora.
El dirigente de Ecobol Rubén Bascopé informó que las ventas en el lugar empezaron hace siete meses y desde entonces «las autoridades municipales no tomaron acciones toda vez que el comercio debe ser regulado por ellos».
Frente a esa situación, la gerencia decidió levar rejas para en el atrio.»Vamos a enrejar este lugar para resguardo. A parte de la mala imagen, la gente ha convertido a este lugar en un punto neurálgico para la delincuencia y lo esta volviendo en barrio chino, no lo vamos a permitir», aseguró
Otro sitio de entregas de productos, con menos afluencia, es la Plaza San Francisco, a pocos pasos de Correos.