Hace algunos años se creía que la tarjeta de presentación solo la llevaban los empresarios, o personas que ocupaban importantes puestos de trabajo, especialistas, etc. Sin embargo, es necesario tomar en cuenta que en las tarjetas de presentación, están impresos el: nombre completo, ocupación o profesión, dirección, etc; es decir los datos personales que cada uno tiene; sea un líder empresario o un estudiante.
Las tarjetas de presentación se constituyen en un instrumento básico para el desarrollo de networking pues refleja tu marca personal, y si es correctamente presentada permanecerán en la memoria de los otros. Tal vez surja la pregunta ¿Hay forma correcta de presentación de tarjeta, si todas contienen datos personales? La respuesta es afirmativa. A continuación se presentan algunos tips para líderes, emprendedores o aquellas personas interesadas en incidir con su sello personal en los demás.
Sin importar el área o rubro de la profesión u ocupación, el diseño de la tarjeta debe ser creativo, elegante y debe reflejar la marca personal. Para ello se deberá contratar a un diseñador gráfico para destacar de la mejor manera esta marca personal.
Varias tarjetas de presentación se destacan por el diseño de sus logos, o el color o textura del fondo, sin embargo a veces esto puede opacar el texto de los datos personales; lo cual es más importante. Por ello es recomendable elegir fuentes legibles y sencillas con el tamaño adecuado ante todo.
El tamaño estándar de las tarjetas es de 9 cm x 5cm, ese tamaño se ha mantenido a lo largo de los años, cambiar esa tradición puede ser innovador pero puede implicar un manejo inadecuado de la tarjeta, tal vez ya no se acomode a la billetera.
Uno nunca sabe a quién se pueda encontrar en el camino, puede ser el próximo cliente, o socio, o alguien que pueda significar mucho en la vida de uno. Se debe estar siempre listo para esta oportunidad y llevar tu tarjeta personal donde vayas.
Es común que un emprendedor se haga imprimir 500 tarjetas, la cantidad está proyectada para un uso de larga data, por tanto se las debe conservar para que mantengaun buen estado; de tal manera que conserve su brillo y color. Colocarlas en un lugar aislado fuera del alcance del sol o humedad o del constante manipuleo, es primordial. Se dice que no hay nada peor que entregar una tarjeta ajada, puesto que genera una mala impresión.
La experta en etiqueta y negocios Lydia Ramsey recomienda que al momento de entregar y recibir tarjetas se haga con la mano derecha “la mano de la discreción” acompañada de una sonrisa en el rostro del que da la tarjeta, grandes empresarios y líderes internacionales reconocen esta acción y además genera un actitud positiva en el que la recibe.
Cuidar la posición en la que se presenta las tarjetas, las mismas que estén volteadas en la dirección de la persona que la va a leer.
La persona que recibe la tarjeta primero debe observarla y se recomienda hacer un comentario con respecto a la misma: algún detalle en el diseño, algún dato de la persona pues esto demuestra que el otro está valorando a la tarjeta y a la persona.
Si se cambia de domicilio, de número de celular, o correo electrónico; es necesario volver a imprimir las tarjetas con los datos actualizados, tacharlos y volver a escribir los datos actuales en la tarjeta da una mala impresión.
Uno puede estar algo ansioso por hacerse conocer con empresarios, líderes o amistades, pero no hay que apresurarse a entregar las tarjetas o distribuirlas como casino, mejor aguardar a que los demás te la pidan, si esto no ocurre mejor solicitar la tarjeta a la otra persona y lograrás que la misma te la pida, así se genera un intercambio recíproco.