¿Cómo producir más sin tener que afectar el producto ni el medio ambiente? Cada vez se ve como un desafío mayor en nuestro medio, en una época en la que muchos productores bolivianos recurren al camino sencillo de utilizar pesticidas, insecticidas o fertilizantes químicos. Sin embargo, a nivel internacional, es cada vez mayor la exigencia del cultivo orgánico.
Por ello, dos instituciones en Cochabamba se dedican desde hace ya varios años a la promoción de bioinsumos para la producción agrícola en Bolivia.
Por un lado está la fundación Proinpa, dedicada a la investigación y transferencia de tecnología para productos agrícolas, y por el otro, Biotop, una empresa boliviana que reproduce y comercializa los logros de Proinpa. Ambas trabajan lado a lado en ambientes de El Paso.
El principio fundamental, según explica, el gerente de Biotop, Mario Crespo, es desarrollar bacterias, hongos, virus, que son la línea de microorganismos, a partir de los cuales se producen los biofertilizantes, bioinsecticidas y biofungicidas, además de los abonos foliares (para nutrir las plantas a través de las hojas).
Proinpa, que en 1998 dejó de depender del Estado para convertirse en una fundación, realiza una serie de investigaciones para lograr el microrganismo natural que puede hacer frente a plaga. Según explica la responsable del laboratorio, Giovanna Plata, la técnica principal es la prueba de enfrentamiento, esto es colocando, por ejemplo, hongos malos junto a los benéficos. En este proceso, deberán irse separando los que dan buenos resultados haciendo frente a las plagas. Así de 30 iniciales, quedarán 12, luego cinco y finalmente tres, por poner un ejemplo, que pasarán a probarse, primero en invernadero, y después en el campo. Finalmente, Proinpa seleccionará el mejor resultado y lo pasará en una placa madre a Biotop.
Éste, con un equipo de 16 personas, entre biólogos, agrónomos y técnicos, desarrolla y multiplica estos microorganismos a través de técnicas estáticas o dinámicas.
Biotop inició sus acciones en 2008 como una empresa privada y brazo comercial de Proinpa, y fue creciendo paulatinamente en producción y ventas. En 2009, había vendido entre 200 mil y 300 mil bolivianos, pero tres años después ya vendía el millón de bolivianos. Su mejor gestión a la fecha fue 2014, con más de 5 millones de bolivianos en ventas. Este año, se llegó sólo a los 4 millones, pero la gestión aún no concluye y la empresa prevé subir algo más con los pedidos que se esperan para la siembra en Santa Cruz.
Biotop, además, invierte actualmente un millón de bolivianos para la construcción e instalación de un sistema de biorreactores para acelerar la reproducción de los citados microorganismos y reducir este proceso de 15 a tres días.
Proinpa prueba microorganismos benéficos de apoyo a la agricultura»
La Fundación Proinpa acaba de recibir el premio a Mejor Innovación Nacional 2015, un certamen organizado por el Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf) y que se realizó el 26 y 27 de noviembre pasado en Cochabamba.
El proyecto innovador ganador de Proinpa en la categoría Innovador Nacional se denomina “Producción y consumo de cañahua verde, para la seguridad alimentaria”, trabajo ejecutado con los productores de Jankosaya de la provincia Pacajes (La Paz).