El ecosistema de emprendimiento e innovación boliviano se está moviendo a pasos agigantados. Según la fundadora de la aceleradora de negocios Pista 8, Viviana Angulo, este mecanismo ya tiene piernas, cuerpo y cabeza, y ahora está listo para correr.
El sábado 19 de marzo, más de 200 personas se dieron cita en el Campus de la Universidad Privada Boliviana (UPB) de Santa Cruz para dar inicio a la generación 2022 del programa de preincubación, incubación y aceleración de Pista 8, Tech4, liderada por Claudia Requejo y apoyado por Microsoft Bolivia a través de su gerente general para Bolivia, Paola Vergara.
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Una vez más, se evidencia cómo el empuje de las mujeres bolivianas está generando un cambio positivo en el país, pero en este caso también genera oportunidades de desarrollo económico con base en el conocimiento.
Este movimiento orgánico, que a diferencia de otros países no ha tenido financiamiento estatal ni de cooperación internacional, en vez de plantear reclamos, ha generado transformaciones en sectores de economía circular, movilidad, software, delivery, etc.
Incluso se han animado a traspasar fronteras y generar operaciones en otros mercados. En ese este sentido, surge la necesidad de un estudio para poder establecer cuánta inversión, dinero y empleos está generando el ecosistema boliviano, un reto que queda a las universidades del país.
Pero esto está cambiando, y ahora la fundación IES, a solicitud de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (Cosude), el Banco de Desarrollo Productivo, -y con la colaboración de Yo Emprendo, Bridge for Billions, ES2Latam, Peslatam y Ruptura- se impulsa el proyecto de apoyo al ecosistema emprendedor boliviano.
Este proyecto busca la sinergia de los actores, haciendo que las acciones individuales de los últimos años migren a acciones colaborativas.
Este proyecto ha podido “mapear” 65 instituciones: entre ellos 16 de preincubación; 12 en incubación; nueve en aceleración; y 16 para financiamiento.
Asimismo, ha podido identificar más de 14 emprendimientos de base tecnológica, que en los últimos años han impulsado el fortalecimiento del ecosistema boliviano.
En el sector, existe mucha satisfacción por la forma cómo ha evolucionado este ecosistema, generando sinergias y mostrando resultados pese, en algunos casos, a los recursos limitados.
En ese sentido, esta cita, que evidencia el crecimiento de los actores, ha dejado muchas satisfacciones.