El encierro debido al COVID-19 no hizo más que potenciar algunos comportamientos, entre ellos, la preferencia cada vez mayor del celular para realizar diferentes transacciones financieras. No por nada desde la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) informan que, a noviembre de 2021, el pago $imple Móvil con este dispositivo registró la cantidad de 3,8 millones, logrando un valor de $us 285 millones, un monto que en comparación con similar periodo de 2020 tuvo un incremento exponencial del 1.325%.
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Nelson Villalobos, secretario ejecutivo de Asoban, señala que a partir de la pandemia se observa una aceleración en el uso de las plataformas digitales, lo que puede asociarse al aumento de la preferencia de la población por realizar sus transacciones financieras desde sus hogares y sin exponerse a espacios con mayor afluencia de gente.
Villalobos precisó que la situación también generó que se digitalicen servicios financieros, como la apertura de cuentas o la preaprobación de créditos, y que se intensifique en el uso de los call centers y chatbots.
La banca digital permite realizar distintos tipos de transacciones: pago de servicios, impuestos, préstamos; transferencias electrónicas entre cuentas propias y cuentas de terceros, servicios de comercio exterior y billeteras móviles. Actualmente, las 15 entidades bancarias del país cuentan con los servicios de banca digital, detalló Villalobos.
¿Qué ofrecen las transacciones electrónicas en comparación con el uso del efectivo? Villalobos no duda al indicar que una de las virtudes de este sistema es la rapidez, ya que las transacciones se realizan en corto tiempo, sin requerir realizar filas en las entidades financieras.
El acceso a las plataformas digitales es 24/7 (está disponible las 24 horas, los siete días de la semana) para que se puedan realizar diferentes operaciones bancarias en domingos o feriados.
La seguridad es otro elemento a destacar, al igual que la gratuidad, ya que las transacciones a través de la banca digital por montos menores a Bs 50.000 no tienen ningún costo para el cliente.
Jaime Dunn, economista financiero, remarcó que al no portar efectivo, las transacciones digitales no requieren del traslado de efectivo, aumenta la seguridad de las personas, a tiempo de puntualizar que la agilidad en el uso de las aplicaciones es otras de las ventajas del pago electrónico, ya que estas han sido diseñadas para facilitar el uso de la población.
De acuerdo con Asoban, las transacciones que se realizaron a través de las plataformas digitales, a noviembre de 2021, indican que las transferencias interbancarias alcanzaron unos $us 44.000 millones, registrando un crecimiento del 28% en relación a noviembre de 2020.
En cuanto a las transferencias intrabancarias, estas sumaron $us 18.000 millones, con un crecimiento del 27%, con respecto a noviembre de la pasada gestión. Finalmente, el pago de servicios a través de plataformas digitales ascendió a los $us 3.000 millones, lo que significa un aumento de hasta el 31%.
“Como se aprecia, la desagregación de las órdenes electrónicas de transferencia de fondos da cuenta de incrementos en los volúmenes de transacciones realizadas, situación que también se aprecia en la desagregación por cantidad, mostrando que cada año se incrementa su uso por parte de la población”, dijo Villalobos.
De manera global, las transacciones a través de las plataformas digitales, a noviembre de 2021, según lo registrado en las órdenes electrónicas de transferencias de fondos, superó los $us 65.000 millones, con un crecimiento del 28% en relación a similar periodo de 2020. En términos de cantidad de transacciones, estas llegaron a los 83 millones, lo que indica un aumento del 74%, en comparación con noviembre de 2020.
Jorge Kuljis, CEO de Síntesis y especialista en métodos de pago, considera que el sistema de pago electrónico -impulsado por la pandemia- tuvo un incremento exponencial y llegó para quedarse y seguir penetrando en los diferentes segmentos de la sociedad boliviana.
En cuanto a la preferencia de los celulares para las diferentes operaciones financieras, Kuljis sostuvo que es lógica la preferencia por este dispositivo con mayor presencia entre los jóvenes y los adultos.
Al respecto, de acuerdo con los datos de la Autoridad de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) hasta fines de 2019, existían 11,5 millones de líneas móviles en el país. Los departamentos que registran la mayor concentración de celulares son La Paz (29%), Santa Cruz (28%) y Cochabamba (18%).
Mientras que, en 2020 el crecimiento de número de conexiones de internet, a escala nacional, se incrementó considerablemente alcanzando la cantidad de 9.907.145 millones de conexiones a Internet, tanto en el servicio fijo, como móvil; encabezados por los departamentos del eje central, por su versatilidad económica y comercial.
En este análisis, se destaca que el acceso de la población a Internet se realiza principalmente a través de su teléfono móvil; alcanzando el 94%, en fija 5% y otros 1%.
En este escenario, desde el Banco Central de Bolivia (BCB) explicaron que, acorde a las necesidades de la población boliviana y tendencias mundiales, se estableció políticas para facilitar e incentivar el uso de los pagos electrónicos por parte de la población a través del sistema financiero, orientadas a la actualización del marco normativo, destinado a profundizar el funcionamiento seguro y eficiente de los pagos electrónicos, así como facilitar la modernización del sistema de pagos electrónico nacional.
Para tal efecto, se emitieron las Resoluciones de Directorio del BCB N° 069/2021 de 27 de abril de 2021, Resolución de Directorio N° 141/2020 de 8 de diciembre de 2020 y Resolución de Directorio N° 203/2016 de 18 de octubre de 2016, modificaciones y versiones anteriores.
La implementación de infraestructura tecnológica de hardware y software hizo posible realizar pagos electrónicos entre todas las instituciones financieras con licencia de funcionamiento otorgada por la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) e integrar los pagos electrónicos de las personas a través de todas las entidades de intermediación financiera, detallaron desde el ente emisor.
Sin embargo, para Asoban la economía de nuestro país aún se caracteriza por el uso de efectivo en prácticamente todas las transacciones, por lo que, si bien se observan importantes avances, se reconoce que queda mucho por hacer.
Desde el sistema bancario indicaron que continuarán realizando esfuerzos que permitan que las transacciones cotidianas se realicen de manera ágil y segura, a tiempo de señalar que una de las iniciativas para ese fin, ha sido la implementación de $imple, pago móvil; herramienta cuyo crecimiento es alentador, y sus ventajas han permitido que sea galardonada a escala regional y nacional.
El economista Germán Molina observa que, si bien las transferencias electrónicas muestran números interesantes, el grueso de la población aún no disfruta de las ventajas de este sistema de pago y todavía ‘carga’ el efectivo y mantiene la forma presencial.