Oruro es conocida por ser la capital del folclore que se percibe su majestuoso carnaval que declarado patrimonio intangible de la humanidad ante la UNESCO. Dentro del área económica, Oruro fue un gran referente de la historia nacional por la gran cantidad de estaño que se produce a lo largo de los años. Una muestra de ello se puede conocer en la casa de Simón I. Patiño que fue considerado el rey del Estaño.
Actualmente, en el ámbito productivo, Oruro es el primer productor de estaño a nivel nacional y cuenta con el sector agropecuario en el cual se destacan productos como la quinua, alfalfa, papa y los camélidos, según datos de la Dirección de Análisis Productivo (DAPRO) y el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural.
Para el 2018, el Producto Interno Bruto de Oruro superaba los 2.000 millones de dólares, que representa el 5% del PIB de Bolivia, determinando un per cápita anual de 3.849 $us. Según cada actividad económica, en primer lugar está el sector extractivo de la minería con el 27%, seguidos por los servicios de administración pública con el 20,34%.
Respecto a las exportaciones, hasta el 2019 el departamento de Oruro llegó a exportar 388 millones de dólares, es decir, el 4% total de las exportaciones nacionales. Sus principales mercados son Estados Unidos, Japón, China, Países Bajos, entre otros.
Además de ser un productor en minería y agropecuaria, Oruro también obtuvo grandes ganancias por el turismo que produce su majestuoso carnaval, ya que generó más de mil millones de dólares.
Con relación al ámbito empresarial, según FUNDEMPRESA, hasta diciembre del 2020, existen 16.157 empresas y hubo un crecimiento del 1.9.%, lo que manifiesta que en total el 4.8% de empresas a nivel nacional son orureñas.
Con todo lo mencionado, no cabe duda que Oruro a lo largo de su historia y actualmente sigue siendo un pilar importante en la economía boliviana.
¡Felicidades querida tierra de amor y carnaval en tu 240° aniversario!