Las exportaciones bolivianas suman los $us 5.355 millones y las importaciones 3.945 millones, es decir, el país registra una balanza comercial positiva de $us 1.410 millones en cinco meses del 2014. El gas, la industria manufacturera, los minerales, la agropecuaria, la construcción y los servicios financieros se convierten en el sostén económico. Pero, hay preocupación por la caída de los minerales y de los precios de las materias primas, según coinciden el Instituto Nacional de Estadística (INE) y los empresarios de Bolivia.
A mayo de 2014 la tasa de crecimiento de las exportaciones fue alrededor del 6%, que es menor comparado con años precedentes. En ese sentido, se observa que el ritmo de crecimiento si bien viene cayendo en algunos sectores, tanto en valor y volumen, no preocupa al Gobierno ni a los organismos internacionales, pero hay cautela en los privados.
El Banco Mundial proyecta para Bolivia una tasa de crecimiento económico al final del año de 5,2%; la Cepal 5,5%, el FMI un 5,1%, y el Gobierno en el Presupuesto General del Estado proyectó un 5,7%. Los empresarios de Bolivia creen que estará alrededor del 5,1% y 5,5%, lo que significa una moderación con relación al 6,8% registrado en 2013.
La economía boliviana sigue creciendo. Nuevamente se ha reportado una expansión del PIB por encima del 6% y la previsión es que el pronóstico se consume. Sectores extractivos y de servicios -entre los que se destaca nítidamente la construcción- explican tal dinamismo. La demanda interna, fuertemente alentada por el gasto público y la inversión, financiados con impuestos y regalías que provienen de actividades extractivas como la explotación de hidrocarburos y minerales, tiene una alta cuota-parte para este éxito económico. Siendo que la mayor parte del gas que se produce en Bolivia se exporta y casi todos los minerales que se extraen van al extranjero, es imposible explicar este crecimiento sin poner la mirada en el sector externo. Al paso que vamos, las exportaciones repetirán su valor de 12.000 millones del 2013, pero las importaciones estarán cerca o por encima de los 10.000 millones. El gas natural mantiene su dinamismo, pero los minerales vuelven a caer, mientras que las exportaciones no tradicionales cobran dinamismo. Lo que debe llamar la atención es la alta expansión de las importaciones creciendo hasta mayo un 8%, mientras que las ventas externas se ralentizan y crecen solo un 6%
La economía de Bolivia sigue en buena situación, aunque ha disminuido su dinámica que presentó a diciembre del año 2013, con una tasa de crecimiento anual del 6,8% del PIB, la más alta tasa en los últimos 38 años. Con datos para el primer trimestre del año se concluye que la economía bajó su ritmo anual de crecimiento al 6,5%. Los sectores más dinámicos se encuentran en hidrocarburos, construcción y servicios financieros con tasas anuales por encima del 10%. Minería y transportes son los sectores de menor crecimiento con una tasa de solo un 3%. Con datos al mes de mayo se concluye que las exportaciones están cayendo casi un 1% anual y las importaciones están creciendo a un ritmo anual del 11%. La expansión de las importaciones está apuntando también al crecimiento de la economía.
El sector fiscal muestra una mayor dinámica en los gastos que en los ingresos con datos a abril. La tendencia es a caer en déficit fiscal en 2014, en contraposición a las gestiones anteriores donde hubo superávit. Sin embargo, esta situación no es problemática ya que el sector público tiene ahorros que los puede utilizar.