El condominio Torres del Poeta, que se construye en La Paz, será el complejo inmobiliario más grande de Bolivia, albergará departamentos, oficinas, servicios bancarios, centro comercial, parqueos, guardería, supermercado y áreas verdes.
El arquitecto Miguel García, fiscal (supervisor) de la obra, sostuvo que llevar adelante la iniciativa representa un importante desafío técnico y arquitectónico.
Se trata de la obra más grande ejecutada no sólo en La Paz sino en Bolivia hasta el momento. Son 110 mil metros cuadrados (m2) construidos, sobre un solar de 11 mil metros cuadrados, la torre más alta es de 40 plantas”, explicó.
El Ventura Mall, de Santa Cruz, un nuevo complejo comercial, tiene 100 mil metros cuadrados, mientras el Megacenter de La Paz tiene 80 mil metros.
La construcción se inició en 2012 mediante una alianza de inversionistas privados y se espera que concluya el próximo año con la entrega de 204 departamentos, 74 oficinas, 74 locales comerciales y más de 700 parqueos, además de patio de comidas y áreas verdes.
La construcción aprovechó la ladera que se extiende desde la avenida Arce hasta la avenida del Poeta, en su parte posterior y tiene su parte frontal en la antigua Casa Goitia, ubicada en la plaza Isabel la Católica.
En Bolivia 40 plantas de hormigón es un desafío impresionante, la norma boliviana nos quedaba corta para cumplir con todos los requisitos de seguridad. Entonces nos hemos apoyado en la norma americana, que es mucho más exigente. Por eso podemos garantizar que esto tiene tecnología de punta”, explicó.
Aseguró que la construcción se levanta sobre un terreno estable. «El terreno es grava Miraflores, que es un terreno bastante bueno para cimentar”.
Según García, las Torres del Poeta se constituyen en un sitio con todos los servicios.
Por ejemplo, si una persona no quiere salir del condominio, no es necesario que lo haga porque contará con todos los servicios; además de áreas verdes; patio de comida; spa; gimnasio; guardería; supermercado; panadería; centro de negocios; banca; consultorios médicos; depósitos; bauleras y 74 oficinas.
El arquitecto precisó también que se definió que la infraestructura sea un espacio agradable y estético. Además contará con sistemas de control mediante tarjetas y guardias.
Actualmente trabajan 300 personas, entre obreros y obreras, que cuentan con las condiciones de seguridad como la instalación de redes para evitar que un trabajador se caiga; carretes y grúas para trasportar material; prendas de vestir y cascos especiales; y una enfermería.
Otro aspecto que destaca la construcción es la preservación del patrimonio urbanístico y arquitectónico de la ciudad, ya que el ingreso mantiene intacto la fachada de la conocida Casa Goitia, que servirá de centro comercial.
La construcción y planificación están a cargo de Fe y Alegría y el grupo Grentidem, presidido por el empresario español Jordi Chaparro, que ya edificó el Megacenter de Irpavi.