Hoy más que nunca se habla bastante de competitividad en los países, en las empresas y en las personas. Pero ¿qué es la competitividad y cómo ser más competitivos?
Para Michael Porter la competitividad se vincula a la capacidad de conseguir el bienestar y por lo tanto está determinada por el nivel de productividad con la que una nación, región o empresas, utilizan sus recursos naturales, humanos y de capital.
A nivel empresarial, los factores que inciden en la capacidad competitiva son la relación entre la calidad y el coste del producto, el nivel de precios de los insumos, así como el nivel de salarios en el país productor. Asimismo, otros aspectos muy importantes para incrementar la competitividad son la eficiencia de los sistemas o técnicas de producción y el aprovechamiento de los recursos necesarios para la elaboración de bienes y servicios, es decir, la productividad.
Así, una empresa será más competitiva en un mercado si logra producir más a menor costo, con altos niveles de productividad, eficiencia y calidad, todo lo cual se traduce en una elevada rentabilidad por unidad de producto. En este sentido, las empresas más competitivas son aquellas que pueden asumir mayor cuota de mercado ante empresas menos competitivas.
No obstante, la competitividad también supone aspectos como la calidad, la innovación y la diferenciación del producto o servicio en relación con aquel que ofrecen los competidores. Otros aspectos, como la capacidad para generar la mayor satisfacción en los consumidores a partir de un precio fijado, o la capacidad de poder ofrecer a un menor precio cierto nivel de calidad, son también factores claves.
La pérdida de competitividad, por su parte, supone una situación de aumento de costes de producción que incide negativamente en el precio o el margen de beneficios que este arroje, todo ello sin aportar mejoras a la calidad del producto. La pérdida de competitividad, en este sentido, amenaza a largo plazo una empresa.
¿Cómo lograr que tu empresa sea más competitiva? Te proponemos 5 claves para hacer de tu empresa más competitiva en el mercado.
Las empresas principalmente están constituidas por personas y para lograr una alta competitividad antes de enfocarte en los procesos toma en cuenta la capacidad del personal que te rodea. Bajo ese principio toma muy en serio la calidad de personal que requiere tu empresa, no creas que los procesos de selección y contratación de personal corresponde solo a las grandes empresas, como pyme también tómate el tiempo para captar personas talentosas a tu empresa.
Las Pymes generalmente se caracterizan por ser de carácter familiar in embargo, esto no siempre implica que los parientes o amigos más confiables sean talentosos para dar soluciones y plantear propuestas creativas.
Analiza los componentes de tu empresa, prioriza los aspectos fundamentales para promover una mejora. Por ejemplo, el área de tecnología es un área que acepta modelos de outsourcing. Además si la empresa subcontrata personas y no servicios, hay alto potencial de reducir costos.
Determina qué procesos se pueden optimizar mediante la tercerización: teniendo métricas claras de hacia dónde se quiere llevar la organización.
Apóyate en diferentes herramientas y aplicaciones tecnológicas para alcanzar tus objetivos planteados. Por ejemplo: herramientas como el networking, que además de ser gratuita, pueden elevar las ventas del negocio un 41%, mejorar el proceso un 55% y reducir los costos operativos hasta un 24%, según datos de la empresa dedicada a la consultoría especializada para redes de Pymes, Angelike. Asimismo, establece métricas y compromisos con periodos de tiempo determinados y con una revisión constante a lo largo del plazo dado.
Un aspecto importante para mantenerse en la cima es el fomento a la educación constante. Es importante que la empresa se desenvuelva en el marco de las tendencias y el desarrollo en todo nivel. Y para ello la constante actualización y capacitación del equipo es fundamental. Contar con información y conocimiento nuevo representa una ventaja competitiva para enfrentar cualquier desafío. El mundo se mueve y cambia más rápido que la velocidad de la información y tu empresa no puede estar ajena a esta dinámica.
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