La durabilidad es el factor diferenciador de Plastiforte, una empresa cochabambina con más de 35 años de trayectoria y especializada desde hace 15 en la fabricación del polietileno de alta densidad o HDPE (por sus siglas en inglés), una tubería que, según explican los representantes de la empresa en Bolivia, tiene una garantía de 100 años.
La mayoría de las tuberías actuales instaladas en la ciudad de Cochabamba y otros lugares son PVC, que no llegan a durar más de 20 años, por lo que, con el tiempo, los costos en este último caso son mayores, explican Gustavo Heredia y Mauricio Garrón, gerentes general y comercial, respectivamente.
Según Heredia, el supertubo HDPE es una tubería de alta presión ideal para sistemas de agua potable, riego, aplicaciones industriales, como la minería, y redes de gas natural. “Con estas tuberías no sólo garantizamos redes de agua libres de fuga, sino que también cinco veces más de vida útil”.
Garrón, en tanto, indica que se puede tener la idea errada de comparar metro a metro los costos del PVC con el HDPE, sin considerar que este último requiere menos trabajo y uniones, por lo que su rendimiento es mayor. Las uniones son justamente los puntos por donde ocurren las mayores fugas de agua. “Por cada tres kilómetros hay 30 uniones en el supertubo HDPE y 500 en el PVC”, explica.
Además, añade Heredia, los tubos HDPE vienen en rollos, no en barras, y reclaman zanjas más angostas, sin descartar la posibilidad de instalarse con trenchless, sistema que permite excavaciones horizontales sin necesidad de tocar la superficie.
Plastiforte también ofrece accesorios para uniones de su línea Superjunta. “El supertubo puede ser unido por tecnofusión o electrofusión: dos rollos de tubería se vuelven un sistema monolítico”, indica Heredia.
Según Garrón, muchas empresas e instituciones se percatan de este aspecto, al punto de que ya casi todos los municipios de Cochabamba utilizan el nuevo producto, lo mismo que las empresas municipales de agua de Sacaba, La Paz, Sucre y Santa Cruz, además de mineras como San Cristóbal, Sinchi Wayra, Panamerican Silver y Minera Paititi, que utilizan el tubo de Plastiforte. La única que aún no utiliza este sistema es Semapa, para la zona central de la ciudad (en la zona sud se lo aplicó con éxito).
En cuanto a efectos ambientales y de salud, los gerentes explican que a diferencia del PVC, sobre el que se debaten posibles efectos nocivos en el agua, no ocurre lo mismo con el HDPE. Además, pasados los 100 años de uso, el supertubo puede reciclarse, aunque no se lo recomienda para nuevos tubos.
Nuestro material se elabora con material virgen. Por eso garantizamos la calidad», concluye Heredia.
Cochabamba pierde 50 por de su agua en sus instalaciones de redes, y el costo de las pérdidas sube si se considera que es agua procesada. Si recurriera al HDPE lo mismo que otras Epsas del país, dejaría de perder agua. Y no necesita ni siquiera hacer excavaciones en el pavimento. Es un gran desafío» refiere, Gustavo Heredia, Gerente General Plastiforte
En estos 15 años nos hemos especializado. Muchas empresas fabrican polietileno, pero nosotros tenemos la solución completa, incluyendo accesorios y asesoramos sobre el uso de nuestro producto. Si estamos cerca de nuestros clientes es para garantizar el éxito de sus proyectos», afirma Mauricio Garrón, Gerente Comercial Plastiforte.
El uso del supertubo HDPE en la construcción de sistemas de agua potable, riego y gas, conlleva beneficios y ventajas significativas que permiten la construcción de mejores sistemas en menor tiempo, tales como:
Plastiforte es una sociedad liderada por el emprendedor boliviano Édgar Heredia, padre del actual gerente general, Gustavo Heredia.
La empresa boliviana nació en 1978, pero hace 15 años se especializó en HDPE. Según los gerentes, la empresa no trabaja con distribuidoras, porque perdería el contacto con los proyectos de sus clientes.
Es una empresa ISO 9001 certificada y el supertubo cuenta con el sello Ibnorca, según ISO 4427.
Para producir HDPE, la empresa importa resina de polietileno de Estados Unidos y procesa mediante extrusión en su planta de Santiváñez. Los demás materiales son importados.
También trabaja con la membrana geotérmica para la contención de agua.
Su planta se halla en el Parque Industrial de Santiváñez, pero tiene oficinas en Santa Cruz, Sucre, Oruro y Potosí. Hace dos semanas inauguró sede en Tarija y a fin de año prevé lo mismo en La Paz.