Fuente: Canasto.es
Un común denominador de los emprendedores y líderes es dedicar todo su tiempo en desarrollar su negocio, como ser más productivo en sus actividades, para ellos el tiempo vale oro, y un minuto debe ser aprovechado al máximo. Sin embargo esta forma de trabajo conlleva a alcanzar un éxito pero sólo en su vida profesional, o laboral dejando de lado el área personal, de allí que los adictos al trabajo, o llamados también workaholics sufran de estrés, problemas alimenticios, desgaste entre otros.
Como dicen por allí, “toda exageración lleva sus consecuencias” de allí que algunos emprendedores o líderes se vean afectados por problemas de salud. Aunque suene ya trillado, estos problemas de salud convocan llevar un equilibrio entre su vida personal y el trabajo, o empresa esto no solo los ayudará a mejorar su calidad de vida sino también obtener mejores resultados en su emprendimiento, trabajo o actividad.
Muchas veces puedes sentirte ataviado con los asuntos de la oficina, pensando más en los problemas que en las soluciones. ¿Cómo vas a resolver un problema si continúas pensando en el conflicto y no en las alternativas de solución? Date un espacio para alejar tu mente de todo lo referido en cuanto al trabajo camina, ve al cine, haz ejercicio, la idea es que aclares tu mente. Verás que al día siguiente, desatarás los hilos sin mayor problema.
Pasas largas horas en la oficina, acudiendo a reuniones, hablando con clientes, atendiendo asuntos, respondiendo preguntas, llamadas, haciendo informes. Sabes que ocupas un posición de mucha responsabilidad en el trabajo o en la empresa, pero este trajín cotidiano te ha llevado a generar una relación de codependencia: dependes de la empresa, y la empresa depende de ti. Sin embargo, esta relación puede ser agobiante dado que te aleja de tus objetivos personales.
¿Saliste de vacaciones este año? ¿Has hecho algo por ti recientemente? Si las respuestas son negativas, quiere decir que te estas ocupando más en los demás o en asuntos externos que en tu persona. Empieza a delegar funciones y organiza un tiempo para tu trabajo y otro para ti. Tómate el tiempo que necesitas.
La familia, los amig@s forman parte de la vida personal de uno. Existen personas exitosas a nivel profesional, empresarial etc, pero ese tiempo dedicado a su emprendimiento o trabajo ha descuidado otros aspectos como su vida personal, y esto quiere decir no solo su estado de salud, sino también a su familia y a sus amigos.
Llegar a casa tras un día largo de trabajo para encontrarse con que el hijo se enfermó, o problemas con los servicios, con la pareja, entre otros, es a consecuencia del escaso tiempo que dedican los emprendedores o líderes a sus familias.
Un líder que busca el éxito en diferentes niveles de su vida, trabajará no solo para desarrollar propuestas de solución o cambio en su oficina o con su equipo, sino también llevará esa misma atención y esfuerzo para resolver sus problemas familiares. Encontrará los mecanismos para generar formas de comunicación de acercamiento con sus hijos, su pareja o sus amistades. Encarar y limar asperezas en el hogar, te llevarán a vivir en paz con tus seres queridos y contigo mismo.
La ley de trabajo establece “8 horas diarias de trabajo” si estás en el plan de hacer un equilibrio entre el trabajo y la vida personal no te excedas de esa regla, eso no quiere decir que te alejes de los objetivos de trabajo. Más bien enfócate en ellos y organiza tu tiempo para alcanzar esos resultados de forma eficiente para no tener que quedarte horas extra.
Si contestar llamadas, ver tu agenda en tu celular también te estresa, apaga el celular, rompe el vínculo laboral los fines de semana o luego del trabajo, pues estas ocupado en atender asuntos personales.
Fuente: Netquest
Permanecer en el mismo espacio por muchas horas, al frente de una computadora, o revisando uno u otro documento se convierte rápidamente en rutina y cuando no se divisan cambios quiere decir que no están fluyendo las ideas. La rutina cotidiana va en contra del lado caótico y desorganizado que propone la creatividad, situada en el hemisferio derecho del cerebro.
El tiempo libre de las 4 paredes de la oficina, de los procesos te dará espacio para hacer nuevas cosas, explorar en ese caos de tu hemisferio derecho y te motive a hacer cambios desde la posición de tu escritorio, o a nivel profesional desarrollo de nuevas propuestas. Es la creatividad la que permitirá esos cambios.
Una vez que dediques tiempo para ti, te darás cuenta que más que un profesional, emprendedor o trabajador eres una persona que tiene necesidades, problemas pero también capacidades para desarrollar un balance entre la vida y el trabajo.
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